IES Emilio Canalejo Olmeda Blog Periódico Digital ECO Opinión REFLEXIONES SOBRE LA ATENCIÓN PLENA
Opinión Periódico Digital ECO

REFLEXIONES SOBRE LA ATENCIÓN PLENA

Hoy en día, el ritmo de vida ha cambiado por completo. La sociedad lo está asimilando poco a poco, pero se encuentra sin herramientas suficientes para gestionar la velocidad con la que suceden los acontecimientos. Vivimos para y por el trabajo, la familia y los que nos rodean. Pero y nosotros, ¿qué? ¿Somos conscientes de que debemos cuidarnos? Mimar nuestra mente, dejarnos llevar por nuestro corazón. Instantes…, sólo momentos. Conforme pasa el tiempo, nos volvemos más egoístas, orgullosos, prevalece el “yo”. Nuestra sensibilidad es mermada por la envidia, el rencor, la apatía…Por ello, ¿existe solución? En nosotros mismos se encuentra. Respirar lento; sentir que el aire canaliza nuestro cuerpo y llega hasta el lugar menos apreciado; disfrutar del aquí y ahora; ser conscientes del momento en el que estamos viviendo; pasear, escuchando la música de nuestro exterior, percibiendo olores que jamás habíamos descubierto…

Pues bien, en el trabajo sucede lo mismo. Disfrutar de ser docentes; de aquello que un día, pensamos y sentimos que queríamos hacer; enseñar con una sonrisa; empatizar con nuestro alumnado, con humanos que a veces gritan y son voces de socorro. Pero, ¿cómo podemos desarrollar nuestra labor en circunstancias que, en ocasiones, se nos escapan de las manos? Dijo Benito Pérez Galdós que El amor es un arte que nunca se aprende y siempre se sabe, pues pongámoslo en práctica. Necesitan de nuestra ayuda.

La relajación es un recurso que nos conduce a la atención plena. Cuando nuestra mente está dispersa y piensa en varios temas al mismo tiempo, nos produce una sensación de frustración que no podemos gestionar. Si ponemos nuestras manos en el vientre e inhalamos y exhalamos varias veces y lentamente, sintiendo cómo nuestra barriga se hincha y deshincha, notaremos rápidamente diferencias que, quizás, pocas veces hayamos experimentado. Cuando mis alumnos vienen nerviosos del recreo, se alteran porque tienen exámenes o se acaloran tras un debate en clase, resulta más productivo parar (“stop”) y respirar (“relax”). Acompañados mediante una música suave y un ambiente preparado, podemos invitarles unos minutos a la sensación de calma, lo cual no sólo produce sosiego en todos los que estamos en el aula, sino también una máxima concentración que a posteriori se nota en el desarrollo del proceso de enseñanza y aprendizaje.

Es mi humilde ejemplo y con todo cariño lo comparto con vosotros.

Wooden bridge in the autumn forest

Patricia Fernández Melgarejo, profesora de Lengua castellana y Literatura

Deja una respuesta Cancelar la respuesta

Salir de la versión móvil